Queen St. Tower
Año:
El diseño inicial del edificio consistía en cuatro volúmenes irregulares que se intersectan en diferentes bordes y terminan a alturas variables. La complejidad de las curvas de las fachadas y la presencia de líneas rectas en ángulos no convencionales requirieron un enfoque estructural adaptable. Se analizaron dos sistemas estructurales, optando por uno que transfería gradualmente las cargas a una base más ancha. Esta elección permitió mantener el diseño original sin interrupciones visuales, evitando columnas intrusivas en los espacios interiores. El informe detalla los elementos y esquemas que respaldan este concepto estructural, destacando su idoneidad para crear espacios cómodos y preservar la integridad del diseño arquitectónico inicial.